La idea de alzarse con alegría y compartir nuestra fe con otros es una de las más poderosas que podemos experimentar en nuestras vidas. En el artículo «Shout It from the Rooftops», Elder Bruce C. Hafen comparte su profunda experiencia personal sobre este tema, destacando cómo la fe en Dios ha transformado sus vidas y la de sus seres queridos. Este artículo no solo ofrece una visión emocionante de lo que es compartir nuestra fe, sino que también brinda consuelo a quienes buscan un sentido más profundo de propósito.
A través de su testimonio, Elder Hafen nos invita a reflexionar sobre el plan de salvación de Dios y cómo cada acción que tomamos puede ser una oportunidad para compartirlo con otros. Su historia es un ejemplo vivo de cómo la fe puede ser un motor poderoso para el cambio positivo en nuestras vidas y en las de aquellos alredes. Así que, si estás listo para descubrir cómo alzarte con alegría y compartir tu fe, sigue leyendo.
El Plan de Salvación de Dios

El plan de salvación de Dios es el corazón de nuestra existencia como seguidores de Jesucristo. Este plan, revelado a través de la palabra de Dios y la experiencia personal, nos da una comprensión clara de nuestro propósito en este mundo. Elder Hafen destaca cómo este plan no solo nos salva del mal, sino que también nos permite crecer y prosperar en nuestra relación con Dios.
La idea central del plan es la redención, donde Dios ofrece a cada ser humano la oportunidad de regresar a Su presencia. Este plan es basado en el amor incondicional de Dios hacia nosotros y su deseo de restaurarnos a Su hogar eterno. Al comprender este plan, podemos encontrar consuelo en momentos difíciles y tomar decisiones que nos guíen hacia la salvación.
Además, el plan de salvación incluye la redención a través del Salvador, Jesucristo, quien sufrió por nosotros para que pudiéramos ser salvados. Esta comprensión profundiza nuestra fe y nos permite compartir esta verdad con otros, invitándolos a buscar su propia redención.
Mi Experiencia de Conversión

Mi experiencia personal como seguidor de Jesucristo es un testimonio poderoso de cómo el plan de salvación puede transformar nuestras vidas. Elder Hafen comparte su historia de conversión y bautismo, que marcó un punto de inflexión en su relación con Dios. Su historia nos muestra que la fe no solo se desarrolla a través de experiencias personales, sino también a través del apoyo de nuestra familia y la comunidad.
La conversión es un proceso profundo que implica más que simplemente aceptar una creencia; implica un cambio radical en nuestra forma de pensar y vivir. Elder Hafen describe cómo su experiencia de conversión fue acompañada por rituales familiares, como matrimonios y batismos por la autoridad, que le ayudaron a fortalecer su relación con Dios.
Esta experiencia personal no solo lo llevó a unirse a la Iglesia de Jesucristo, sino que también lo motivó a compartir su fe con otros. Su historia es un ejemplo de cómo el plan de salvación puede ser aplicado en la vida diaria, permitiendo que cada acción sea una oportunidad para crecer y servir.
Rituales Familiares: Fortaleciendo la Fe

Los rituales familiares son un aspecto fundamental de nuestra relación con Dios. Elder Hafen menciona cómo los rituales como el matrimonio por autoridad y el bautismo por autoridad no solo fortalecieron su conexión con Dios, sino que también le brindaron una sensación de propósito y dirección en su vida.
El matrimonio por autoridad es un ritual que permite a dos personas casarse sin la presencia física del clérigo. Este ritual no solo establece un vínculo entre los cónyuges, sino que también fortalece su relación con Dios. Elder Hafen describe cómo este ritual le dio una sensación de certeza y seguridad en su decisión de casarse.
El bautismo por autoridad es otro ritual que ha sido significativo en su vida. Este ritual permite a los padres decidir si sus hijos son aptos para recibir el sacramento del bautismo, lo que les da un sentido de control y responsabilidad. Elder Hafen menciona cómo este proceso le permitió ver la fe de sus hijos crecer y desarrollarse.
Estos rituales familiares no solo fortalecen nuestra relación con Dios, sino que también nos motivan a ser misioneros en nuestras vidas diarias. Al participar en estos rituales, podemos sentirnos más conectados con el plan de salvación y más inspirados a compartir la fe con otros.
Llamado a Ser Misioneros

El llamado a ser misioneros es un aspecto fundamental de nuestra vida como seguidores de Jesucristo. Elder Hafen destaca cómo este llamado se siente cada vez más fuerte en su vida, especialmente al ver a sus hijos servir en misión. Esta experiencia personal lo ha motivado a compartir su propia fe con otros, creyendo que todos tienen un papel importante en el plan de salvación.
La idea de ser misioneros no solo se limita a viajar a lugares distantes; también implica ser misioneros en nuestras comunidades y familias. Elder Hafen describe cómo ha aprendido a ver la misión como una parte integral de su vida diaria, compartiendo su fe con amigos, familiares y colegas.
Este llamado a ser misioneros no solo es un desafío personal, sino que también ofrece una recompensa profunda: ver a otros recibir la redención y crecer en su relación con Dios. Elder Hafen menciona cómo este proceso le ha permitido encontrar alegría en el servicio a los demás y en compartir la fe con aquellos que están dispuestos a escuchar.
Líderes y Apoyo

El apoyo de líderes y amigos es crucial para nuestro crecimiento como seguidores de Jesucristo. Elder Hafen destaca cómo su comunidad ha sido un refugio de amor y apoyo, permitiéndole seguir en el plan de salvación con confianza. Los líderes de la Iglesia han sido una fuente de orientación y guía, ayudándolo a navegar por momentos difíciles.
Este apoyo no solo es emocional; también es práctico. Elder Hafen describe cómo los líderes han proporcionado oportunidades para crecer en su fe y servir a otros. La participación en grupos de estudio, voluntariado y otros actividades comunitarias ha sido fundamental para su desarrollo como seguidor.
El apoyo de amigos y familiares también ha jugado un papel importante en su vida. Elder Hafen menciona cómo sus seres queridos han compartido su fe con él, creando un ambiente de amor y comprensión que lo ha motivado a seguir en el plan de salvación.
Conclusión

La experiencia personal de Elder Hagen nos muestra que la fe no solo se desarrolla a través de momentos significativos como la conversión o rituales familiares, sino también a través del apoyo constante de líderes y amigos. Su historia es un testimonio poderoso de cómo el plan de salvación puede transformar nuestras vidas y motivarnos a compartir nuestra fe con otros.
Al comprender el plan de salvación y su importancia en nuestras vidas, podemos encontrar consuelo en momentos difíciles y tomar decisiones que nos guíen hacia la redención. La experiencia personal de Elder Hagen nos invita a reflexionar sobre nuestro propio crecimiento en la fe y cómo podemos compartir esta verdad con otros.
En última instancia, el plan de salvación es un llamado a todos nosotros: a seguir en Su presencia, a crecer en nuestra relación con Dios y a compartir la fe con los demás. Al aceptar este llamado, podemos encontrar alegría en nuestro servicio a los demás y en la misión que nos ha sido asignada.