La relación entre maestro y disciple es la base de la comunidad. Esta relación debe ser igual, basada en la fe que se refleja en el comportamiento de cada miembro. Los disciples no deben ser más responsables que sus maestros, ya sea por la posición o por el poder que tienen. El servicio debe ser realizado con pasión y sinceridad, como si se fuera a servir al maestro. Los líderes de la casa, como el maestro, deben ser tratados con la mayor respeto y reverencia. Los miembros del hogar deben ser considerados con la misma dignidad que los miembros del hogar de un maestro. El miedo a los demás es un mal juicio, ya sea en la vida o en el cielo. La valentía y la valentía humana son valores que deben ser recompensados.
La relación maestro-discípulo

La relación entre un maestro y su disciple es la base de la comunidad. Esta relación debe ser igual, basada en la fe que se refleja en el comportamiento de cada miembro. Los disciples no deben ser más responsables que sus maestros, ya sea por la posición o por el poder que tienen. El servicio debe ser realizado con pasión y sinceridad, como si se fuera a servir al maestro.
El maestro debe ser un modelo de integridad y valores, y el servicio debe ser un reflejo de su sabiduría y guía. Los miembros del hogar deben seguir la ejemplo del maestro y mostrar que el servicio a Dios es una prioridad.
El miedo a los demás es un mal juicio, ya sea en la vida o en el cielo. Es importante que todos se comporten con compasión y amor, y que cada miembro tenga la oportunidad de crecer en su relación con el maestro.
La valentía y la valentía humana son valores que deben ser recompensados. Los miembros del hogar deben estar seguros de que están en el camino correcto, y que no se rendan ante la prueba.
La relación maestro-discípulo es una relación que debe ser construida con respeto y amor. Cuando los miembros de la comunidad tienen una relación con el maestro, están más propensos a servir a Dios con sinceridad y pasión.
El servicio con pasión

El servicio con pasión es la base del éxito de cualquier relación. Cuando los miembros de la comunidad tienen un servicio con pasión, están más propensos a servir a Dios con sinceridad y pasión.
El maestro debe ser un modelo de integridad y valores, y el servicio debe ser un reflejo de su sabiduría y guía. Los miembros del hogar deben estar conectados con el maestro a través del servicio, y deben mostrar que están comprometidos a seguir sus instrucciones.
El miedo a los demás es un mal juicio, ya sea en la vida o en el cielo. Es importante que todos se comporten con compasión y amor, y que cada miembro tenga la oportunidad de crecer en su relación con el maestro.
La valentía y la valentía humana son valores que deben ser recompensados. Los miembros del hogar deben estar seguros de que están en el camino correcto, y que no se rendan ante la prueba.
El servicio con pasión es una relación que debe ser construida con respeto y amor. Cuando los miembros de la comunidad tienen un servicio con pasión, están más propensos a servir a Dios con sinceridad y pasión.
El respeto y la reverencia

El respeto y la reverencia son dos aspectos esenciales de la relación maestro-discípulo. El maestro debe ser tratado con la mayor respeto y reverencia, y los miembros del hogar deben mostrar que están sinceros y agradecidos por la atención y las instrucciones del maestro.
El respeto se refiere a la admiración por el maestro y su sabiduría. El maestro debe ser reconocido por sus compañeros y por la comunidad por su dedicación al servicio a Dios.
La reverencia es un reconocimiento de la dignidad del maestro y su autoridad. El maestro debe ser considerado con la mayor dignidad, y los miembros del hogar deben mostrar que están comprometidos a seguir sus instrucciones con la mayor atención y cuidado.
El miedo a los demás es un mal juicio, ya sea en la vida o en el cielo. Es importante que todos sean tratados con respeto y dignidad, y que cada miembro tenga la oportunidad de sentir su valor en el servicio a Dios.
El valor de la dignidad

El valor de la dignidad es un concepto central en la relación maestro-discípulo. El maestro debe ser considerado con la mayor dignidad, y los miembros del hogar deben mostrar que están comprometidos a seguir sus instrucciones con la mayor atención y cuidado.
El valor de la dignidad es un concepto que debe ser aplicado en todas las relaciones, pero es especialmente importante en la relación maestro-discípulo. Cuando los miembros de la comunidad tienen un sentido de la dignidad, están más propensos a comportarse con integridad y respeto, y a trabajar juntos para alcanzar el propósito común.
El valor de la dignidad es un valor que debe ser recompensado, tanto por los miembros del hogar como por el maestro. Cuando los miembros del hogar tienen un sentido de la dignidad, están más propensos a ser responsables y serviciales, y a seguir las instrucciones del maestro con mayor atención.
El miedo al miedo

El miedo al miedo es un mal juicio, ya sea en la vida o en el cielo. Es importante que todos sean tratados con respeto y dignidad, y que cada miembro tenga la oportunidad de sentir su valor en el servicio a Dios.
El miedo al miedo nos prevents de explorar el verdadero poder de Dios, y nos mantiene en la corriente del miedo. Cuando nos dejamos llevar por el miedo, no estamos haciendo el uso del poder que nos ha sido dado, y nos estamos dejando llevar por el poder del miedo.
El miedo al miedo nos mantiene en el camino correcto, nos mantiene a la escucha de lo que Dios nos está diciendo, y nos mantiene a trabajar juntos para alcanzar el propósito común.
La valentía y la valentía humana

La valentía y la valentía humana son valores que deben ser recompensados. Cuando los miembros del hogar tienen una valentía y una valentía humana, están más propensos a comportarse con integridad y servicial, y a trabajar juntos para alcanzar el propósito común.
La valentía y la valentía humana son valores que deben ser aplicados en todas las relaciones, pero son especialmente importantes en la relación maestro-discípulo. Cuando los miembros del hogar tienen una valentía y una valentía humana, están más propensos a ser responsables y serviciales, y a trabajar juntos para alcanzar el propósito común.
Conclusión

En la relación entre maestro y disciple, la reverencia, la valentía y la valentía humana son valores que deben ser recompensados. Cuando los miembros del hogar tienen unareverencia, una valentía y una valentía humana, están más propensos a comportarse con integridad y servicial, y a trabajar juntos para alcanzar el propósito común.